SERIE CALIENTE: Revancha De Macho a Macho ( Episodio 2 )

--"No tienes que ofrecerle disculpas a nadie." Una voz ronca y masculina interrumpió en el cuarto de juntas. Esa voz que jamas podría olvidar. Era EL. Era Luis Ivan Landeros. "Se le está pagando muy bien, los jefes no piden disculpa a sus empleados."

Sentí que la sangre me hervía de la rabia que me dio al referirse a mi como su empleado. Era un hijo de puta. Arrogante y Soberbio. Pasó a un lado de mi,  Ni siquiera me saludo. Bueno, ni siquiera me miró.
Caminó hasta su silla con la mirada perdida y el teléfono celular en la mano. Seguía siendo un Semental Completo. Se veía mejor que en las fotos que circulaban por los medios de comunicación. No cabía duda de que los años le sentaban cachondamente, el olor de su perfume me estremeció, era el mismo perfume de aquella noche hacia 8 años. Era un macho de machos. Sin embargo, en su rostro se podía apreciar los estragos que le estaba causando su divorcio. Las ojeras y la expresión facial no mienten. Tampoco creo que estuviera haciendo un gran esfuerzo por ocultar nada.

--"Siento contradecirlo, Señor Landeros, pero yo no soy su empleado." respondí tratando de mantener una calma que estaba muy lejos de sentir. Yo quería que volteara a verme, yo quería saber si me iba a reconocer.

Y con mi respuesta logré llamar su atención, dejó el celular a un lado y levantó su mirada. La expresión en su rostro era fría e indiferente.  Me miró de arriba a abajo. Su mirada era imposible de leer. Sus gestos una barrera de acero que no permitía transmitir ninguna emoción. Parecía tener hielo en las venas.

Yo quería encontrar alguna señal de si me había reconocido o no. Pero su rostro no me decía nada, los movimientos de su cuerpo tampoco. Se puso de pie y nuestras miradas se cruzaron como espadas listas para la guerra. Por fin pude ver que la vena de su cuello palpitaba aceleradamente, por fin una señal, por fin una muestra de algo. No sabia si me había reconocido o si estaba enfurecido por mi respuesta, pero
Por fin después de 8 años estábamos FRENTE A FRENTE. Por fin iniciaba la Revancha De Macho a Macho.

El silencio que se apoderó de la sala de juntas era abrumador, la tension en el aire se podia cortar con un cuchillo. Los 3 Asistentes de Luis Ivan y las 2 Secretarias no podían creer que yo me atreviera a hablarle a su jefe de la manera que lo había hecho.

Pero mi pregunta seguía sin respuesta. Luis Ivan seguía con su mirada clavada en mi, sus ojos hasta hacia apenas unos segundos indiferentes ahora brillaban de furia y rabia contenida. Era evidente que estaba haciendo su mejor esfuerzo para no perder la compostura; pero solo fueron unos segundos donde EL dejó aflorar el coraje que le había producido mi comentario, porque inmediatamente volvió a esconderse en su expresión de indiferencia total.

Y la respuesta a mi pregunta era NO. Luis Ivan Landeros NO me había reconocido, sentí como si me enterraran una daga en el centro de mi pecho. Yo había considerado esta posibilidad, pero me dolía confirmar que aquella noche hacia 8 años no había significado nada para EL. Que pendejo había sido al pensar que yo hubiera podido dejar algo grabado en su mente, alguna huella de aquella noche. Sin embargo era mejor así, porque iba a tener todo a mi favor para llevar acabo mi revancha; EL desconocía el pasado que nos unía y eso me convenía para acercarme y ganarme su confianza.

--"Tan poca fe le tiene a su propuesta que ya se auto descalifica del proyecto?" el tono de su voz era sarcástico y retador. Nuestras miradas seguían enclavadas en una guerra de expresiones escondidas de su parte y contenidas de la mia.

--"Yo tengo plena confianza en la propuesta que le voy a presentar. Solo quería aclarar que no soy su empleado. Represento a una compañía que busca obtener un contrato. Y esa es la que me paga."  lo vi levantar una de sus cejas. Destilaba masculinidad por cada poro de su piel. Y también una arrogancia que no le cabía en el cuerpo.

Aquella noche, 8 años atrás yo me había vuelto loco de deseo ante su dominio en la cama. Pero hoy las cosas habían cambiado. Su dominio de Macho no iba a intimidarme.

--"Estoy cansado." dijo EL moviendo su silla bruscamente. "Creo que vamos a tener que posponer esta reunión para mañana."

Hijo de Puta, mil veces hijo de Puta. Yo no podía creer lo que estaba sucediendo ante mis ojos. Pero no debía sorprenderme.

--"Esta seguro, Sr. Landeros?" le pregunto uno de sus asistentes. Flavio, con quien yo había realizado todas las negociaciones previas a esta junta.

--"Que parte de que esta reunión se pospone hasta mañana, no te queda claro?" le contestó EL y antes de salir del cuarto de juntas se detuvo en la puerta para volver a verme. "Si le interesa obtener el contrato, lo veo aquí mañana a las 9 de la mañana. Y si no... feliz viaje de regreso a donde quiera que sea que vaya."

Salió azotando la puerta detrás de EL.  La mirada de los 3 asistentes y las 2 secretarias estaban clavadas en mi. Yo tenia que tener mucho cuidado que ellos no se dieran cuenta de que debajo de mi se escondían unas inmensas ganas de venganza. Tenia que mantener mi profesionalismo ante todo. No podía desaprovechar esta oportunidad. Con manos temblorosas recogí los documentos que tenia sobre la mesa y los guardé en mi portafolios, nadie decía nada, seguían en silencio y como estatuas, sin moverse. Yo guardé mi laptop, sentía una frustración infinita pero no se la iba a demostrar a nadie.

--"De verdad nos interesa la propuesta." exclamó Flavio cuando yo estaba a punto de retirarme. "A Luis Ivan también…" No pude evitar sorprenderme de que Flavio se refiriera a su jefe por su nombre y con una confianza que no era usual entre un jefe y empleado, porque Flavio si era su empleado, Yo no. Y Flavio pareció darse cuenta de mi sorpresa y la de los demás ahí presente, porque rectificó de inmediato.  "Quiero decir, a nuestro jefe también le interesa su propuesta, sino jamas hubiera aceptado esta reunión. Espero que entienda que esta pasando por un momento difícil. De verdad esta cansado porque tuvo que volar muchas horas para llegar hoy aquí."

Era obvio que sus empleados lo iban a justificar y mi problema no era con ellos, era con EL.

--"Puedo entender eso, pero me gustaría que Ustedes entendieran que yo represento una empresa que espera resultados, mi jefe no tomara nada bien que nuestra primera reunión se canceló." contesté yo mientras observaba a cada uno de los 3 Asistentes. "Voy a esperar a la junta de mañana, pero si su jefe continua con esa actitud, tendré que irme con mi propuesta a otro lado. Ustedes saben que no será difícil venderla en otra parte, la competencia la conocen ustedes mejor que yo."

Salí de la sala de juntas sintiendo las miradas de todos. Cuando cerré la puerta me tuve que recargar contra la pared, mi presión sanguínea debía estar a punto de explotar del coraje y la rabia que sentia. Otra vez por culpa de Luis Ivan Landeros pasando un mal rato. Era un hijo de la gran puta. Mil veces hijo de la gran puta. Pero no iba a rendirme tan facilmente sin dar la pelea, esto apenas empezaba.
Caminé lentamente hasta mi cuarto ubicado en el quinto piso del hotel, mientras iba en el elevador fue inevitable no recordar momentos de aquella noche hacia 8 años.

--"Quitate los zapatos y bajate el pantalon, rápido Cabrón!!"

Yo había obedecido sin vacilar, solo pensando en complacerlo.

--"Ahora date la vuelta y empinate."

Ni un solo día de los 8 años transcurridos había podido olvidar cada una de sus ordenes, de sus caricias y de sus embestidas de verga. Innumerables mañanas y noches me había jalado mi verga recordando cada uno de los momentos de aquella noche que marcó mi vida para siempre. Había sido la cogida mas chingona de toda mi vida.
Tampoco había olvidado la forma despiadada y arrogante en que me había echado de su cuarto.

--"Aquí hay mas dinero. Es todo lo que te voy a dar. Tienes un culito apetitoso, pero tampoco es para que te quieras pasar de listo cobrando demasiado. No soy tu pendejo, Cabrón"

EL me había quitado el dinero que me había dado minutos antes y que yo aun traía en la mano, para juntarlo con el que acaba de sacar de su cartera.

--"Estas en un err…."

No me había dejado hablar. Poniendo todo el dinero junto en una bolsa de mi pantalón y abriendo la puerta me había echado al pasillo del hotel. Sin dejarme hablar, sin importarle nada.
Yo toqué la puerta de su cuarto muchas veces, pero nunca me abrió, solo su voz fuerte pude escuchar perfectamente.

--"Vete y deja de molestarme o le hablaré a los de seguridad del hotel para que te saquen a fuerza."

Un dolor en la boca del estomago me hizo estremecer de la misma manera que aquella noche al salir del elevador.
Entré a mi cuarto un poco desorientado. Tenia que ser mas fuerte y no permitir que me dominaran los sentimientos cursis y patéticos del joven inexperto de 19 años que se había revolcado con un desconocido. Ahora tenia 27 años y Yo iba a ganar esta vez. A huevo que así seria. Lo que yo le tenia preparado al magnate hotelero Luis Ivan Landeros lo iba a destruir igual o mas de lo que El me había destruido a mi.

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Era después del mediodía y había salido a disfrutar de las calles de Nueva York. Era un día frío de Diciembre pero estaba soleado y eso lo hacia mas tolerable. La ciudad era un espectáculo completo. Sentarme en una de sus múltiples cafeterías para contemplar y observar a la gente atraves de los enormes ventanales (especialmente a los hombres) que visitaban la ciudad de alrededor del mundo, era uno de mis pasatiempos favoritos cada vez que tenia la oportunidad de venir a la denominada "Capital Del Mundo". Era increíble la cantidad de hombres guapos que caminaban por las calles del bajo Manhattan, era imposible no calentarte viendo tanto macho cachondo de diferentes razas y colores. Le di un ultimo trago a mi bebida y salí de la cafetería. No tenia ganas de regresar al hotel y tampoco podía seguir sentado ocupando un espacio en la cafetería, había mas gente esperando por un lugar.

El aire del invierno era frío y calaba hasta los huesos. Caminé un rato y tomé la primera bajada que vi para abordar el tren rápido. Me subi en el primero que llegó.

Sin rumbo fijo y sin dirección, no temía perderme, conocía la ciudad lo suficiente para encontrar mi camino de regreso al hotel.
El tren hizo varias paradas y en una de ellas, decidí bajarme. Reconocí el área. Había venido aquí varias veces antes. Caminé emocionado hasta la entrada de una de las famosas Casas De Baño del Bajo Manhattan, seguí todos los protocolos para obtener mi boleto de admisión. Después de algunos minutos de hacer linea y pagar mi entrada, fui al pequeño cuarto que había rentado. Afuera hacia un frío horrible pero aquí adentro la calefacción y el ambiente estaba caliente. Era la hora de la comida y muchos hombres aprovechaban para venir a buscar un rato de sexo y diversión. La Casa estaba llenísima. Esta era una de las casas de baño y sexo mas concurridas por altos ejecutivos que venían de diferentes extractos sociales y sobretodo, de una diversidad sexual sin precedente. Yo siempre había disfrutado cada una de mis experiencias en este lugar. Hoy necesitaba mas que nunca relajarme y olvidarme aunque fuera por un rato de Luis Ivan Landeros. Sexo sabroso y sin compromiso era la mejor alternativa para lograrlo.

El lugar estaba muy oscuro y los pasillos llenos de hombres semidesnudos y otros (la mayoría) totalmente desnudos, me tomó unos minutos adaptarme a la poca luz que había, pero  después de algunos minutos finalmente pude aclimatar mis ojos. Había un olor fuerte a semen, a sexo, a Macho caliente.
 Traía mi verga alborotada de ver tantos hombres desnudos paseando por los pasillos, buscando a alguien que le gustara para pasar un buen rato también. Llegué hasta mi cuarto y me quité mi ropa rápidamente, los artículos de valor los había dejado en el hotel, solo había traído mi cartera con un poco de efectivo y mi identificación, pero las había dejado en la entrada en una caja de seguridad que obviamente pagabas por un costo extra. Me miré el espejo antes de salir a unirme al grupo de hombres que paseaban por la casa.
Empecé a caminar lentamente, observando y disfrutando de los ejemplares de Machos que como yo caminaban por los pasillos, buscando a alguien para coger y disfrutar de un buen rato. No todos los que venian aqui rentaban un cuarto, algunos solo venían y caminaban por los pasillos y se iban a coger en una de las salas abiertas o se iban a coger con alguien que había rentado uno.

Había un "protocolo de conducta" que seguir, porque sino el equipo de seguridad te sacaba. Los cuartos con puertas abiertas y con un hombre adentro era señal de que él estaba disponible; si estaba boca arriba mostrando la verga, era un Activo buscando culo. Si estaba boca abajo mostrando el culo, era un Pasivo buscando verga. Si estaba de lado era un Versátil y buscaba verga o culo. Muchas puertas estaban cerradas y se podían oír los gemidos de la buenas cogidas que estaban teniendo. Machos en brama disfrutando de sexo salvaje y completo.

Y también había muchas puertas abiertas con hombres esperando a que alguien entrara al cuarto y aceptara su ofrecimiento para coger. Me asomé a varios cuartos que tenían la puerta abierta. La atracción tenia que ser mutua. Algunos de los hombres que estaban disponibles no me llamaban la atención y algunos que me gustaron, yo no les gusté. Seguí recorriendo los pasillos hasta llegar a una de las salas abiertas. Había muchas parejas que apenas se habían conocido y estaban cachondeandose bien rico y sabroso. Contra la pared estaban los hombres que los observaban y estaban jugando con su vergas. Muchos iban solo a ver coger y jalarcela mientras observaban a los demás. Era una escena lujuriosa, sucia, pervertida y extremadamente excitante. Aquí no había inhibiciones ni complejos sociales, aquí lo que había eran ganas de coger hasta agotar cada energía de tu cuerpo, de mamar verga y de clavar culo como lo hacen los Machos de verdad.

Yo me puse en una esquina a observar también  y a jugar con mi verga. Estaba bien caliente viendo aquellos cuerpos desnudos y con sus vergas bien afiladas. Había varios sofás a lo largo de la sala y en ellos había parejas, tríos y cuartetos de hombres cogiendo para gozo del publico que los veía , disfrutando del sexo y de que los vieran coger.

Orgía de lamidas de culo… culitos que pedían a gritos que les dieran verga. Pero antes de darcela, se los estaban comiendo a lengüetazos, haciendo que se dilataran en la espera ardiente de sentir aquel trozo de carne prometido. Querían verga y la querian toda y hasta el fondo.

De chupadas de verga… Vergas bien duras, bien paradas que buscaban la atención que solo un hombre le sabe dar a otro hombre. Atención Oral que quizá no encontraban en su casa y que el cuerpo reclamaba sin tregua y que de una o de otra manera se lo tienes que dar. Y este era el lugar adecuado para encontrar una lengua tibia y disponible.

Y clavadas de verga… Esa unión tan primitiva y ancestral como el universo pero perfecta como pocas. Esa danza de macho contra macho que te lleva a tocar el cielo por segundos y que no importa que dure tan poco, porque no hay como hacerlo una vez y otra vez; para alcanzar ese pedacito de cielo que solo dura instantes, pero que se goza como si fuera eterno.

Solo de ver aquel despliegue de sexo sin reglas ni barreras se te ponía la verga dura y la mente volaba por senderos de lujuria y perdición. Cuerpos sudados y entregados a los deseos de la carne, consumidos en la hoguera del morbo y del placer interminable.

Después de un rato de estar viendo, dos hombres se me acercaron, eran jóvenes, pero debían tener la mayoría de edad para entrar; se pusieron de rodillas ante mi, señal de que querían chuparme la verga, yo no me sentía atraído hacia hombres mas jóvenes que yo, pero estaba tan caliente que no me iba a negar a que me  la chuparan. Necesitaba atención y ellos estaban dispuestos a darmela. Les hice una señal afirmativa y me la empezaron a mamar.
Unos labios tibios primero y luego una lengua ardiente recorrían mi verga de abajo hacia arriba, los dos tomando turnos para chuparmela. Era una sensación imposible de describir, no sé si podía ponerme mas caliente de lo que ya estaba, pero me estremecí de cuerpo completo cuando sentí que uno de ellos me chupaba la verga con un destreza inigualable y el otro me chupaba las bolas. Era la primera vez que dos hombres me la chupaban al mismo tiempo. Abrí un poco mis piernas para tener mejor balance, el placer que estaba sintiendo era demasiado. Uno de los chavos aprovechó el espacio para meterse entre mis piernas y lamerme las parte entre mis bolas y mi culo, gemí de placer y el otro chavo no perdió tiempo en adueñarse de mi verga por completo, no había terminado de disfrutar la lamida de mis bolas cuando sentí un lengüetazo en la apertura de mi culo.

--"Aaahhh…" un gemido mio que se perdio en el ruido de la musica que había en el lugar, un gemido que era el eco de muchos otros provenientes de los demás hombres que estaban recibiendo sexo oral y otros mas que les estaban reventando el culo. Aullidos de Machos sucumbiendo ante el placer que solo otro cuerpo de Macho te puede dar. #AhuevoCabron

Tener un hombre atrás mamando mi agujero y a otro chupando mi verga era un placer exquisito y no había palabras suficientes para poder describirlo. Cerré mis ojos para entregarme a la enorme variedad de sensaciones que aquellos dos jóvenes desconocidos me estaban dando, cuando los abrí, vi a un hombre musculoso y bien parecido chupando el culo del chavo que me estaba mamando la verga, y cuando creí que ya no podía calentarme mas, mi verga empezó a chorrear pre semen, ver aquella escena me hizo casi venirme, el pre semen que inundaba mi verga fue devorado por uno de los chavos. Así estuvimos un rato, hasta que el chavo que me chupaba el culo se puso de pie y en el oído izquierdo me dijo:

--"Tienes cuarto? quiero que me metas la verga. Dime que si."

Yo era mas pasivo que activo, pero de vez en cuando me gustaba clavarle la verga a alguien, hoy era uno de esos días. Quería someter a alguien y que me complaciera.

--"Si tengo uno." le contesté yo mientras veía como el chavo que me estaba mamando la verga se ponía de pie tambien y se me acercaba por el lado derecho.

--"Somos 2 los que queremos tu verga." me dijo en mi oído derecho.

Yo les sonreí a los dos.

--"Aquí hay verga para los dos." les contesté. "Vamos a mi cuarto."

Ambos se acercaron para besarme en la boca al mismo tiempo. Luego los guíe hasta el cuarto que yo había rentado. El hombre musculoso que le había mamado el culo a uno de los chavos también nos siguió.

--"Yo solo los quiero ver coger." nos dijo. Aceptamos que se uniera, porque eso hacia mas cachonda la situación.

Cuando llegamos al pequeño cuarto, los dos chavos se pusieron en cuatro patas sobre la pequeña cama, uno enseguida del otro, los vi besarse mientras se acomodaban, tenían unos traseros provocadores y casi perfectos.

El hombre musculoso se puso en una de las esquinas, era alto y velludo, un rostro atractivo y masculino, su cuerpo bien trabajado y definido le paraba la verga a cualquiera. Yo cerré la puerta porque no quería que entrara alguien mas. Tres hombres y yo eran suficientes por ahora.

Los dos chavos se estaban lubricando sus culos con unos de los botes de lubricante que había en el cuarto.

--"Danos tu verga, Papito. Mira como están nuestros agujeros, listos para ti."

Y verga les di a los dos que se movían de una manera calientemente excitante, ofreciendome sus culitos, pidiendo a gritos que se las clavara.

Y toda y hasta el fondo a cada uno la verga se las clavé.

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Después de la cogida chingona con los 2 chavos sali de la Casa de Baño. Estaba a punto de hacerle la señal a un taxi para regresarme al hotel, cuando se me acercó un hombre con lentes oscuros.

--"Pasé un gran rato contigo y tus amigos." me dijo quitandose los lentes. Lo reconocí de inmediato. Era el hombre musculoso que se había unido a nosotros. "Me llamo Scott y me gustaría que Tu y Yo pasáramos un buen rato en un ambiente de emociones mas fuertes y calientes."

--"Mas fuertes y calientes?" le pregunté yo intrigado.

--"Conozco un Club de Hombres y para Hombres del que soy miembro." me contestó sacando una tarjeta de su billetera. "Si quieres conocer de lo que hablo, ven mañana a esta dirección a las 8 de la noche. Nos juntamos 2 veces al mes. Te prometo que te va a gustar." me dijo y luego se subió en un elegante carro que se detuvo a levantarlo.

Era un Gringo bastante atractivo y masculino. Debía estar cerca de los 50, pero estaba mas que retebueno para pasar un rato cachondo. Adentro de la Casa de Baño la mayoría del tiempo había estado observando. Pero tenia cuerpo bien trabajado y una verga de buen tamaño. Leí la tarjeta que me dio. Solo tenia su nombre, un teléfono y una dirección.
Emociones mas fuertes y calientes, había dicho él. La invitación sonaba muy interesante. Mejor dicho, bastante interesante.

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A la mañana siguiente, yo estaba listo y puntual en la Sala de Juntas; esperaba que Luis Ivan Landeros esta vez no fuera a salir con alguna de sus arrogantes actitudes que me tenían harto y cansado. Para mi sorpresa, EL ya me estaba esperando, una de las Secretarias le anunció mi llegada.

--"Señor Landeros, ya llegó el Señor Arenas."

--"Hagalo pasar." contestó EL con su voz inconfundible que tanto me gustaba y aunque odiara reconocerlo, me seguia inquietando. Y si su voz me producía un efecto cachondo, cuando entré a la Sala de Juntas y lo vi, me quedé inmóvil por unos segundos. No se como le había hecho, pero de ayer a hoy había un gran cambio, ayer se veía cansado, hoy estaba fresco y jovial. Su cuerpo imponente y fornido me alborotó la verga. Recordaba cada centimetro de aquel cuerpo de macho que me había hecho gozar como nadie. No podía negarlo, seguía siendo un Machazo hermoso y los años como a los buenos vinos, lo habían vuelto mas apetecible y sabroso.

--"Buenos Dias, Francisco Arenas." me saludó EL desde su silla. "Tome asiento." me dijo.

No había nadie mas en la sala. Solo EL y Yo. Era raro no ver a sus 3 asistentes. Y mas raro era verlo de "buen humor". Me senté en la misma silla en que lo había hecho el día de ayer.

--"Buenos Dias. Voy a conectar mi laptop mientras esperamos a su equipo." exclamé yo.

--"Conecte su laptop, pero no tenemos que esperar a nadie. Esta junta será solo entre Usted y Yo. Nadie mas." me informó EL mientras seguía con sus ojos cada movimiento mío.

Era extraño que ayer tenia a todo su equipo aquí y hoy no. Algo no tenia sentido. EL tenia que haberse dado cuenta de la confusión reflejada en mi cara, porque añadió:

--"Flavio me presentó a detalle su propuesta y me la sé de memoria, Arenas." dijo poniendose de pie. "Y antes de iniciar esta junta, quiero decirle que lo puse a prueba. Ayer me gustó su actitud. Me gusta la gente triunfadora que no se deja someter ni vencer. En esta vida hay que tener muy claro lo que uno quiere."

Yo no podía dar crédito a lo que escuchaba. Me había puesto a prueba?? Eso acababa de decir??

--"Admito que no tengo un carácter fácil, pero en este mundo hay que saber defenderse y no dejar que te aplaste nadie. Usted ayer supo defenderse y no dejarse de mi" continuó EL mientras me miraba fijamente. "Pasó la prueba que le puse, Arenas. No se rindió y aquí esta dispuesto a conseguir el contrato. No se dejó aplastar."

EL me había aplastado hacia 8 años… obvio no lo recordaba, obvio que era su estilo para llegar al lugar en el que estaba. Aplastar, destruir, imponer, someter…verbos que conjugaban muy bien con EL. No importaba que hoy estuviera de buen humor, no importaba que hoy se viera mas atractivo y cachondo que antes… nada importaba porque para mi seguía siendo el mismo Hijo De La Gran Puta que había conocido 8 años atrás !!

--"La vida te va enseñando lecciones que no se olvidan. Aprendes a defenderte." le contesté yo tratando de sonar lo mas normal posible. No podía dejar aflorar mis verdaderos sentimientos. Tenia que conseguir el contrato, tenia que ganarme su confianza.

--"De acuerdo, Arenas." contestó EL. Y mi apellido en su boca sonaba cachondo, provocador, no era posible que me calentara como lo estaba haciendo. "Debe saber que analicé cerca de 10 propuestas antes de decidir cuales eran las 2 mejores. La semana pasada le dimos el repaso final a la otra. La suya también es buena, pero solo hay algo que no me gusta."

--"Qué cosa?" quise saber yo.

--"La parte de la publicidad una vez que se termine el proyecto. Yo no quiero una modelo contratada por Ustedes. Yo quiero a Gilda Navarrete." dijo EL mientras levantaba el teléfono que estaba sobre la mesa. "Karla, digale a Gilda que pase a la Sala de Juntas. Gracias."

En cuestión de segundos conocí a Gilda Navarrete. Era una rubia alta y hermosa, de figura estilizada y rostro de muñeca. No debía ser una modelo conocida, porque ni su nombre ni su cara eran conocidas para mi.

--"Buenos Dias, Amore Mio" exclamó ella cuando entró y se le fue casi encima a Luis Ivan.

--"Buenos Dias, Gilda." contestó EL y ella le dio un beso en la boca.

Sentí un escalofrío en la espalda. No podia estar sintiendo celos. Qué chingados me pasaba??

--"Ella es Gilda Navarrete, la modelo que quiero en la publicidad del proyecto, Arenas." me informó EL.

--"Y también soy tu prometida, Amore Mío." lo corrigió ella mientras yo me ponía de pie para estrechar la mano que ella me extendía.

El escalofrío en mi espalda recorrió todo mi cuerpo. Luis Ivan se estaba divorciando y ya tenia con quien casarse de nuevo. No debía sorprenderme, era famoso por sus amoríos fuera del matrimonio, pero que tan conocidos eran sus acostones con hombres, la cogida que me había dado a mi solo tenia que haber sido una de muchas. Un Bisexual en toda la extensión de la palabra.

--"Si Usted acepta que Gilda sea la modelo para la publicidad del proyecto, entonces estoy listo para firmar el contrato. Es la única condición que tengo, Arenas." su mirada estaba clavada en mi. No había aclarado si la bella mujer era o no su prometida, el que calla otorga. "Que le parece lo que le pido?" quiso saber EL ante mi silencio.

Yo había trabajado mucho para llegar hasta este punto. Y la condición que EL me ponía no era crucial ni afectaba en nada mi propuesta. Era un contrato millonario, la empresa para la que yo trabajaba lo necesitaba. Y era la excusa perfecta para estar cerca de Luis Ivan y llevar acabo mi revancha que sanaría la herida que EL me había dejado aquella noche hacia 8 años.

--"Aceptó su condición." exclamé yo. No podía negar que estaba emocionado. Este contrato me colocaría en un lugar especial en mi trabajo.

--"Entonces no se hable mas." dijo EL mientras se volvía a sentar. "Mis 3 asistentes le van a ayudar y asistir en lo que necesite, yo supervisaré el progreso de proyecto semanalmente directamente con Usted."

Y no sé si lo estaba imaginando o si de verdad EL me había cerrado un ojo. Todo pasó como en una película, repasamos algunas cláusulas del contrato y finalmente llegamos a la firma que sellaba el cierre de las negociaciones y el inicio del proyecto. Mi jefe iba a ponerse feliz cuando yo le diera la noticia.
Luis Ivan no sabia que con su firma no solo había hecho un gran negocio, sino que también era el primer paso para todo lo que yo le tenia preparado. No había que dejarse aplastar por nadie había comentado EL mismo hacia unos minutos. Una lección que yo había vivido en carne propia hacia 8 años gracias a EL.

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Aquella había sido una mañana muy productiva. La firma del contrato, la notificación a mi jefe y un sin fin de llamadas telefónicas me habían mantenido bien ocupado hasta después de las 3 de la tarde.
Eran pasadas las 5pm cuando yo estaba haciendo ejercicio en el gimnasio del hotel que vi a Flavio, uno de los Asistentes de Luis Ivan salir del sauna. No lo había visto bien y ahora que lo hacia estaba sin camisa, en pantalones de ejercicio que le sentaban muy bien. Tenia muy buen cuerpo. Musculoso pero no exagerado. Lo que mas me llamó la atención fue el pronunciado tatuaje que cubría la mitad de su brazo izquierdo.

--"Felicidades por la firma del contrato" exclamó él cuando me vio haciendo cardio en la escaladora.

--"Gracias." le contesté yo con sinceridad. "Tu fuiste parte clave para que esto ocurriera, el Sr. Landeros me dijo que tu le habías presentado el borrador del proyecto a detalle antes de la junta final."

--"Era la mejor propuesta." me dijo él mientras se limpiaba el sudor que le corría por toda la cara y su pecho. "Yo no le hubiera hecho ningún cambio."

--"El unico cambio fue incluir a la modelo sugerida por el Sr. Landeros." le aclaré yo.

--"Exacto. Ese es el peor cambio que se le pudo hacer a tu propuesta. Gilda es un problema andando." me aseguró él.

Y hablando de la reina de roma, que ella se asoma. Atraves de las ventanas grandes vi a Gilda que  venia caminando hacia el gimnasio. A mi no me había dado la impresión de ser una mujer complicada. Flavio no pudo disimular su enfado al verla.

--"Hola." saludó ella cuando entró.

El telefono celular de Flavio sono y yo fui el unico que le contestó el saludo.

--"Hola."

Gilda se subió a la escaladora que estaba enseguida de la que yo estaba usando y me empezó a hacer platica, ignorando completamente a Flavio.
Era mas que evidente que no se llevaban bien.

--"Si, claro que yo también voy a ir." le dijo Flavio a la persona con la que hablaba por teléfono y haciendome una señal de despedida se fue; ignorando a Gilda como ella lo había hecho con él.

Por unos segundos se hizo un silencio que parecía eterno, solo el ruido de las escaladoras se escuchaba, hasta que Gilda empezó a hablar de nuevo.

--"Quizá te preguntas por qué Flavio y yo no nos hablamos. Y como soy una persona que no le gusta andarse con rodeos, te lo voy a decir."

Yo no sabia que decir. Así que no dije nada. Ella siguió hablando.

--"Siempre he pensado que Flavio está enamorado de Luis Ivan." exclamó Gilda y el tono de su voz denotaba una gran rabia y frustración. "No tengo pruebas de nada, pero creo que en el pasado tuvieron algo que ver."

Aquella revelación me dejó sin palabras. Yo sabia que Luis Ivan se acostaba con hombres, yo fui uno de ellos.
Y ahora que lo pensaba, en la primera reunión Flavio se había referido a Luis Ivan por su nombre con una familiaridad que iba mas allá de empleado a jefe.
Y como era posible que Gilda anduviera con Luis Ivan si sospechaba que había tenido algo con Flavio?
Obvio sabia que a su prometido también le gustaba clavar culo de Macho. Y vaya que sabia como hacerlo. Yo no había podido olvidar la tremenda cogida que me había dado.

--"La verdad no sé que decir." le contesté yo.

--"No tienes que decir nada. Disculpa si hablé de mas. Pero no soporto a Flavio y tu me inspiras confianza desde que te conocí hace apenas unas horas. Ademas vamos a trabajar juntos por varios meses."

Yo solo moví mi cabeza asintiendo y seguí haciendo mi rutina de ejercicios. Tenia que darme prisa porque tenia que llegar puntual a la invitación que me había hecho Scott, el gringo que había conocido ayer en la casa de baño. Se me alborotó la verga de solo pensar en las "emociones fuertes y calientes" de las que me había hablado ayer.

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Eran  5 minutos antes de las 8pm cuando llegué a la dirección que me había dado Scott. Era una casa de 2 pisos, ubicada en una área del Bronx, uno de los barrios mas famosos de Nueva York.
Toqué el timbre de la reja y después de esperar unos minutos, un hombre corpulento salió a recibirme, le mostré la tarjeta que me había dado Scott y me llevó a su cuarto.

--"Bienvenido al Club" me saludó Scott cuando me vio entrar, estaba casi desnudo, solo traía puesto un pantalón de cuero negro. "Vas a tener que cambiarte de ropa antes de subir arriba a la sala principal."

--"No sabia que había que traer un tipo de ropa especial. No me dijiste." le contesté yo, confundido.

--"Yo tengo aquí lo que necesitas." me dijo él sacando un short de cuero negro y una mascara negra de uno de los cajones de la comoda que estaba a un lado de la cama. "Este short te debe quedar y si no, entonces subes desnudo pero con la mascara puesta. Todos usamos mascara."

Conforme me iba enterando de mas y mas detalles, mucho mas me iba emocionando. Todo pintaba para que las cosas en este club fueran mas intensas y cachondas que en la  Casa de baño.
Me desnudé sin pensarlo y me puse el short y la mascara. Scott tambien se puso la suya. Nos dimos una buena cachondeada antes de subir a la "sala principal".

--"Me gustas mucho, Francisco." me dijo Scott dandome un apretón de verga y de nalgas. "La vamos a pasar muy bien allá arriba. Te voy a clavar la verga delante de todos. Quiero que todos los miembros del club vean el culito sabroso que me encontré."

Sus palabras me calentaron aun mas, los 2 traíamos nuestras vergas bien paradas. Una buena clavada de verga enfrente de hombres enmascarados hizo que se me acelerara la presión.

--"Llevame arriba y cogeme enfrente de todos tus amigos del club." le pedi yo. "Ya quiero conocer la sala principal y que me la claves."

Scott me dio otro beso y salimos de su cuarto. Afuera en el pasillo había muchos hombres, no tantos como en la Casa De Baño, pero habían varias parejas de hombres y todos andaban con mascara y  pantalones de cuero o simplemente desnudos.

Había una escalera roja para subir a la Sala Principal en el segundo piso.

Era como la entrada a un lugar desconocido y de fantasia. De Sexo y Perversidad en su máximo esplendor.
Al llegar al segundo piso, la sala estaba casi a oscuras. La unica luz provenía  de grandes velas estratégicamente colocadas, que le daban un toque de misterio e intriga.

--"Esta noche nos visita nuestro Master y su esclavo predilecto." me dijo Scott al oído. Yo no dejaba de mirar a mi alrededor. Todo esto era demasiado excitante, morboso, caliente.

--"Quien es el Master y su esclavo predilecto?" quise saber yo.

--"Son aquellos dos." me contestó Scott señalando con su mano derecha a dos hombres que estaban al fondo de la sala. "El que está de espalda con el látigo en la mano es nuestro Master y el que está de rodillas mamandole la verga es su esclavo predilecto."

Scott me tomó de la cintura y lentamente me acercó hasta donde estaban aquellos dos hombres, quedamos a solo pies de distancia de ellos.

--"Te voy a presentar con ellos. El Master ya sabe que tengo nuevo discípulo para estrenar enfrente de todos." me dijo Scott dandome un fuerte apretón de nalgas.

La verga se me endureció aun mas.

El Master tenia un cuerpo espectacular, alto, musculoso, un Macho Total. Sentí que el piso temblaba. Aquella amplia espalda, aquellas piernas fuertes y musculosas y aquellos brazos me recordaban a alguien.
Y cuando miré al esclavo no lo podía creer, tenia un tatuaje igual al que tenia Flavio, el asistente de Luis Ivan.
Los 2 traían sus mascaras puestas, pero no me cabía ninguna duda de que El Master era Luis Ivan Landeros y El Esclavo Predilecto era Flavio, su asistente…..

--"Assiiii…. cometela todaaaa…… Sacame toda la lecheeeee."

Era su voz, era Luis Ivan Landeros quien le ordenaba a su esclavo que lo deslechara.

--"Si le gustas al Master, él también te la puede clavar, todos compartimos a nuestros discípulos…" me dijo Scott apretando mis nalgas.

CONTINUA...
No Se Pierdan El EPISODIO # 3 en el siguiente enlace:
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SERIE CALIENTE: Revancha De Macho A Macho (Episodio 1)

Mi amigo Ernesto  me había invitado a una fiesta en casa de un primo suyo, a mi no me caía bien el tipo, pero era Viernes en la noche y no tenia ningún plan para divertirme, así que acepté su invitación. Me vi por ultima vez en el espejo. Mi pantalón negro ajustado al cuerpo me quedaba chingon, marcando mi trasero abultado y mis piernas marcadas; la camisa color gris resaltaba mi estomago plano, me veia bien. Esperaba conocer a alguien interesante en la fiesta.

--"Te vez bien. Ahora tienes que encontrar alguien para pasarla rico, Francisco." me dije a mi mismo.

Cuando llegamos a la fiesta, ya había mucha gente, la mayoría como era de esperarse eran jóvenes como yo, entre 18 a 24 años. La fiesta estaba animada, era al aire libre a la orilla de la alberca de la casa del primo de mi amigo, había ambiente y todos parecían estarla pasando bien, pero sin embargo algo le faltaba. No sabría decirles que era, pero algo le hacia falta. Después de unas cervezas, me di cuenta que lo que le faltaba era alguien que me llamara la atención. Habían varios chavos guapos, pero ninguno lo suficientemente atractivo para calentarme. Ya me estaba arrepintiendo de haber aceptado la invitación a la fiesta.
Le di un trago a la cerveza antes de levantarme de mi asiento para ir a despedirme de mi amigo; lo mejor era irme solo por mi cuenta a buscar a alguien para pasar un buen rato en otra parte.

Estaba a punto de ponerme de pie cuando lo vi entrar, ese momento nunca lo voy a olvidar!! Era el hombre mas guapo de todo el planeta. No estoy exagerando, Cabrón. A mis 19 años no había visto a alguien como EL.

Era un cuero de cueros. Su presencia era imponente. Nadie mas existía en ese lugar para mi, solo EL. Seguí sentado sin quitarle la mirada de encima, observando cada movimiento de aquel hombre que me tenia embobado.
Era mas grande de edad que casi todos los que estábamos en la fiesta y sin embargo para mi era el mas cachondo de todos. Hasta cierto punto, era raro que alguien de su edad le gustara convivir con gente de mi edad. Era un Macho en toda la extensión de la palabra.

No sé como,  ni cuando, pero después de un largo rato finalmente EL se dio cuenta de mi existencia en aquella fiesta.  Empezamos a intercambiar miradas y después de varias copas de vino que EL se había tomado, finalmente me hizo una señal para que lo siguiera. Yo no podía creer que el hombre mas guapo de toda la fiesta se hubiera fijado en mi. Debía tener un poco mas de 30 años. Era alto, musculoso, velludo, masculino y un porte de modelo que ya quisieran muchos de los que se dedican a eso. Parecía sacado de un comercial de la tele. 

Pero era completamente REAL.

Lo seguí hasta la parte oscura del patio, cuando ya estábamos completamente solos y en la total oscuridad, me tomó de la cintura y me restregó contra su cuerpo fuerte y musculoso. Su aliento a alcohol y el calor que emanaba cada poro de su piel me hicieron ponerme bien caliente y mi verga dura y afilada eran prueba contundente de que aquel desconocido me había flechado totalmente.

--"Te gusta chupar verga?" me preguntó al oído y me pasó su lengua por la orilla de mi oreja, haciendo que me arqueara aun mas contra EL.

--"Si…"le contesté yo y no me dejó terminar de hablar porque me agarro de los hombros para ponerme de rodillas frente a EL, se bajó el cierre del pantalon y sacó su verga que estaba semi dura.

El ruido de la musica y de la gente a lo lejos hacían que la situación fuera aun mas morbosa, mas excitante y por supuesto mucho mas caliente.

--"Mamame la verga y demuestrame que tanto te gusta hacerlo."

Yo no perdí tiempo y me le fui encima, era una verga grande y no estaba totalmente erecta. Pero después de recorrerla de arriba a abajo con mi lengua y mis labios, se endureció y se hizo mas grande y gruesa. Era una verga sabrosa, deliciosa. Mientras se la chupaba o mejor dicho, mientras se la devoraba me imaginaba lo enormemente placentero que seria tenerla adentro de mi culo.

--"Aaaahhh… así…. si así…. que bien que la sabes chupar…."

Aquello era lo único que yo necesitaba escuchar para hacer gala de mis dotes orales, para hacerle el mejor trabajo que yo le hubiera hecho a alguien antes.
No pasó mucho tiempo y lo hice que se viniera a chorros, aquella leche era tibia y abundante, me la tragué toda, haciendo que aquel desconocido se estremeciera de los pies a la cabeza.

--"De verdad que sabes mamarla y sacar toda la leche." me dijo mientras se exprimía su verga con su propia mano, asegurandose de que me tragara hasta la ultima gota. Yo abrí bien mi boca para que así fuera.

EL regresó primero a la fiesta y después yo. Me senté en la misma silla de la esquina y seguí observandolo sin quitarle la vista de encima. EL se dio cuenta de que lo seguía con mi mirada a todas partes.
Después de un buen rato, me volvió a hacer una señal para que lo siguiera, pero esta vez era hacia la salida de la casa. Sin pensarlo, me puse de pie y lo seguí. Cuando llegamos a la puerta de la casa me preguntó  que si estaba dispuesto a irme con EL a un lugar "mas privado y solos los dos". Yo acepté emocionado, no lo pensé, solo le contesté que Si.
Mi amigo Ernesto trató de hacerme entrar en razón y que me regresara a mi casa. 

Ninguna de sus palabras o razones sirvió para hacerme cambiar de idea.

 Por nada del mundo yo iba a rechazar la invitación de un Macho del nivel completo como aquel que acababa de conocer.

--"Quitate los zapatos y bajate el pantalon, rápido Cabrón!!"

Me ordenó con su voz ronca y masculina. Yo obedecí inmediatamente. Me había llevado a un cuarto de hotel. Un hotel muy elegante y caro. Con manos temblorosas me bajé mi pantalon y mi calzoncillo.

--"Ahora date la vuelta y empinate."

EL estaba sentado en un sillon frente a la cama. Era un hombre que evidentemente le gustaba dominar, mandar y someter a sus conquistas. Yo me di la vuelta y me empiné.

--"Muestrame tu culo, apurate Cabrón!!."

Temblando de la emoción y la calentura al mismo tiempo, obedeci sus ordenes, me agarré mis nalgas dejando al descubierto mi agujero para que EL lo viera, para que se deleitara, se calentara y me la clavara.

--"Tienes un trasero bien rico y un culo provocador. Quiero que con una mano juegues con tu verga y con la otra te acaricies tu agujero. Demuestrame que tan puto puedes ser."

Yo traté de quitarme la camisa antes de hacer lo que me pedia, pero EL se levantó del sillon y me dio unas nalgadas.

--"No le he dicho que se quite la camisa!! NO sea pendejo. Aqui se va a hacer lo que yo diga, entendido??"

Me pregunto dandome otras nalgadas.

--"Entendido." le contesté yo.

--"Hable mas fuerte, Cabrón. Y digame ENTENDIDO, Papi"

--"ENTENDIDO, Papi." le respondí mas fuerte.

--"Así se habla, Cabrón. Como los machos y con los huevos bien puestos." y me volvió a dar varias nalgadas mas. Y luego lo sentí frotar su verga dura sobre mi culo. La tenia bien dura. Estaba caliente y con la verga bien afilada y endurecida como el metal.

--"Chupate los dedos de la mano y luego te dedeas ese agujero que se ve delicioso. Apurese Cabrón. Que no tengo su tiempo. Su Macho esta caliente y necesita que le saquen la leche de nuevo, pero esta vez lo vas a hacer con tu culo…"

Sus palabras me iban calentando mas y mas. Sacarle otra vez su leche era lo que mas deseaba hacer.  Me chupé tres dedos de mi mano derecha, me los ensalive bien y luego me empece a dedear, mi verga estaba totalmente dura y parada. Cuando me meti el primer dedo, no pude evitar gemir de placer. 

Aquel hombre desconocido le dio un trago a su cerveza y luego la escupió en mi culo, yo sentí el liquido frío sobre mi agujero.

--"Una ayudadita para que se le lubrique bien el hoyito… Siga dedeandose, prepare el terreno para su Macho."

Y un dedo, dio paso a un segundo dedo. Yo estaba bien cachondo, me escurría pre semen de mi verga. Ya quería sentir la de aquel desconocido destrozandome el culo.

--"Así se hace Putito Calenturiento… Abrale el culo a su Macho." Me dijo y lo senti ponerse de rodillas. Y cuando senti su aliento sobre mis nalgas ya no me quedo duda de lo que se disponía a hacerme.

Su lengua tibia y experta le dio unos roces suaves de subida y bajada a mi agujero. Nunca antes alguien me había comido el culo. Había leido y visto en las películas porno acerca de lo sabroso que es que te chupen el culo, pero lo que me estaba haciendo este hombre, era mas de lo que yo podía aguantar.

Me abri para darle mejor acceso y EL se apoderó de mi agujero como si fuera una bestia castigada a la que no le habían dado de comer en muchos días. Estaba hambriento por comer culo y se estaba devorando el mio. Sin poderlo evitar  y por instinto me agarré las nalgas y me le abrí aun mas. Y sus gemidos y los mios se mezclaron en un himno de calentura total. 

Cuando por unos segundos dejo de lengüetearme para darle unos tragos a su cerveza, ahogué un gemido de protesta y cuando sentí como me escupía la cerveza sobre mi culo otra vez, mis piernas me empezaron a temblar. Esto era la tortura mas divina de toda mi vida. 

--"Se ve que te gusta que te chupen el culo, Cabrón. Te apuesto que nadie te lo había chupado como yo. Verdad?"

Yo no sabia que contestar, primero porque nadie me lo había chupado antes y segundo porque estaba totalmente loco por el placer que aquel hombre me estaba dando con su boca y su lengua que no podía ni hablar.

--"Te estoy hablando, Cabrón. Contestele a su Macho cuando le hace una pregunta."

--"Nadie me lo había chupado como Usted." Y mi respuesta lo excitó de tal manera que se levantó y me agarro de la cintura para aventarme sobre la cama. Yo innatamente aventé las piernas al aire para darle acceso a mi culo. Y EL sin perder tiempo se fue sobre mi agujero, a devorarlo, a saborearlo. Lanzandome al precipicio de la locura. Mi culo se empezó a dilatar ante la invasion de aquella boca y de aquella lengua que se movían con una habilidad oral extraordinaria. Mi verga estaba dura y cuando empecé a jugar con ella, EL me agarro la mano y la alejo de mi verga.

--"Aun no Cabrón. No quiero que te vengas hasta que no te la clave toda y me desleches primero. ENTENDIDO?"

--"ENTENDIDO, Papi."

--"Me gusta tu culito peludo y hambriento." me dijo mientras me lo escupía otra vez.

Y después de darme unos últimos lengüetazos, se acomodó entre mis piernas. Era un Macho Completo. Ese cuerpo musculoso y esa verga dura que tenia me estaban desquiciando. Ya no podía aguantar mas. Ya quería sentirlo adentro de mi, bien adentro de mi.

--"Demela toda, Papi… Toda, todaaaa."

--"Así pidemela, ruegame que te la meta toda. Que toda y hasta el fondo te la voy a dar."

--"Ya no me haga esperar, metamela por favor…"

Se lubricó la verga con su propia saliva y cerveza. Cuando senti la puntita empujando en mi agujero, me retorcí del puritito dolor, me la fue metiendo poco a poco, me dolió y quise pararlo con una mano,  pero EL estaba ardiendo de calentura y necesitaba saciar sus ganas, no tuvo piedad de mi y me la dejo caer toda y hasta el fondo. Aullé de dolor y de placer. Mi culo estaba lleno de aquella verga grande, gruesa, dura y demandante. Posesiva. Una Verga Hambrienta de culo.

--"Traguecela toda, Cabrón….todaaa" 

Y aunque me dolía porque era una verga enorme, me fui acostumbrando. Abri mas las piernas y eso ayudó para que el dolor diera paso al placer que llego con cada clavada que estaba recibiendo. Aquel hombre agarro vuelo metiendo y sacando su verga de mi culo, Destrozandomelo sin ninguna consideración.

--"Ahhhh….. así, si…. así  Papi…. Que rico se siente tenerlo adentro de mi culo."

Y me la empezó a clavar mas y mas fuerte. Las venas del cuello le saltaban de la fuerza que estaba haciendo, los músculos de su cuerpo fuerte y bien marcado eran un regalo para mis ojos. Verlo así me ponía mas y mas caliente, mi culo se le abría completamente. Rendido ante su verga.

--"Que sabroso culo tienes, Cabrón. Hacia un chingo que no me echaba uno culito así de rico y apretadito."

Y a mis 19 años aun no tenia mucha experiencia, pero si sabia que había que apretar los músculos del culo para darle mas placer cada vez que metía y sacaba su verga. Sus gritos de placer solo hacían que yo le diera rienda suelta a mi lujuria y cuando me sacó su verga para chuparme mi culo dilatado yo sentí   rozar el cielo.

--"Oh Papacitoooo… Asiiiiii…. me gusta muchoooo…"

Este desconocido era un experto en coger, en hacer que su pasivo viera las estrellas con cada despliegue de sus caricias, chupadas de culo y sus clavadas de verga. Y aunque cada lengüetazo sobre mi culo era infinitamente placentero, yo queria que me la volviera a meter. Necesitaba sentirlo adentro de mi otra vez.

--"Metemela de nuevo, Papi… Por favor, Papacitoooo…"

Me dio una chupada larga y profunda antes de volver a clavarmela toda y hasta el fondo de una sola embestida.

--"Que culo que tienes, Cabrón!!"

Y cuando sus embestidas de verga se hicieron mas y mas profundas, pero sobretodo mas intensas, EL me agarro la verga con una de sus manos y me la empezó a jalar. Yo gemi de placer. Su mano era fuerte y grande. Nos empezamos a mover en un ritmo armonioso de perfecta union. Y unidos por verga y culo, llegamos juntos al paraíso, ese momento magico que se siente al llegar por unos segundos al cielo.  Ese momento que solo un macho le puede dar a otro macho.

--"Aahhhh…. Ahhhhhh……  Que ricoooo culooo…."

EL gritó de placer y yo me chorrie sobre mi pecho, mientras sentia su leche caliente llenarme por dentro. 

EL fue sacando su verga poco a poco y con dificultad se puso de pie. Yo abri mis brazos, invitandolo a que se acostara en la cama junto a mi. Pero EL se dio la vuelta ignorandome. 

Lo vi ir a buscar su pantalon y sacar su cartera. Sacó varios billetes y se acercó a la cama.

--"Me voy a dar un baño. Arreglate y vete. No te quiero encontrar aquí cuando salga." Me dijo y dejó los billetes sobre las sabanas blancas de la cama. "Gracias, me la pasé muy bien. Hasta Nunca."

Y desapareció de mi vista sin que yo pudiera reaccionar o decir algo. Como pude, me levanté de la cama y agarre los billetes. No entendía nada. Absolutamente nada. 

Escuché el ruido de la regadera. Me puse mi ropa y me senté en el sillon a esperarlo a que saliera de bañarse. Yo tenia que hablar con EL y regresarle el dinero. 

Aunque no nos fuéramos a ver otra vez, EL tenia que saber que yo no me acostaba por dinero. Que le estaba pasando a este hijo de puta?? Por que se portaba así conmigo??

Cuando salió del baño envuelto en una toalla blanca, me le quise ir encima, primero para reclamarle por que me había dado ese dinero y después para que me cogiera otra vez. Se veía deliciosamente cachondo recién salido de bañarse.

--"Aun no te vas?" me preguntó sorprendido. "Ahora entiendo, disculpa si no fue suficiente." dijo y volvió a ir a buscar su cartera.

--"Aquí hay un error. Yo no…"

Pero no pude terminar de hablar porque EL me tomó de un brazo y me llevo hasta la puerta con una fuerza y con una rapidez que me dejo sin habla.

--"Aquí hay mas dinero. Es todo lo que te voy a dar. Tienes un culito apetitoso, pero tampoco es para que te quieras pasar de listo cobrando demasiado. No soy tu pendejo, Cabrón"

EL me quito el dinero que yo aun traía en la mano y lo puso con el que acaba de sacar de su cartera.

--"Estas en un err…."

No me dejo hablar. Puso todo el dinero junto en una bolsa de mi pantalón y abriendo la puerta me echó al pasillo del hotel. Sin dejarme hablar, sin importarle nada.
Yo toqué la puerta de su cuarto muchas veces, pero nunca me abrió, solo su voz fuerte pude escuchar perfectamente.

--"Vete y deja de molestarme o le hablaré a los de seguridad del hotel para que te saquen a fuerza."

Un dolor en la boca del estomago me hizo estremecer cuando caminé hacia el elevador. Como era posible que una de las noches mas felices y cachondas de mi vida se convertiera en unos segundos en la mas miserable de mi existencia?? 

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8 Años Después  

La lluvia intensa que azotaba la ciudad se podía sentir al escuchar la fuerza con la que golpeaba los vidrios de las ventanas de mi casa. 

Ya era hora de dormir, pero no podía dejar de mirar el periódico. Había leído una y otra vez la misma nota. Ya me la sabia de memoria.

"El Prestigioso y destacado Magnate Hotelero Luis Ivan Landeros hace oficial su divorcio. Expertos estiman que dicho divorcio le costara varios millones de dólares. El divorcio llega después de 10 años de matrimonio y aun se desconocen los detalles del mismo. Pero fuentes extraoficiales aseguran que se debería a uno de los tantos romances que Landeros a sostenido fuera de su matrimonio. Su mujer cansada y harta de los deslices de su marido, habría entablado la demanda, que hoy, el magnate Landeros ha aceptado como oficial."

Luis Ivan Landeros. Había conocido su nombre 2 días después de que me había echado de aquel cuarto de hotel. Porque el nombre que me había dado aquella noche en la fiesta era falso. Y aunque me hubiera dicho su nombre real, yo no sabia quien era. No tenia idea de lo que significaba LUIS IVAN LANDEROS.

Cómo iba a imaginarme que en una fiesta tan normal y tan común yo iba a conocer a alguien tan rico, poderoso y tan famoso como EL?

Cómo iba a poder imaginarme que Yo conocería el lado mas oscuro del magnate hotelero LUIS IVAN LANDEROS?

Apagué la luz y traté de dormir. Pero no fue facil, cerré mis ojos y mientras me acariciaba mi cuerpo desnudo, su cuerpo y su rostro se apoderaron de mi mente, otra vez EL, otra vez Luis Ivan haciendo que me verga se pusiera dura y exigiendo  que me masturbara, que aliviara aquella necesidad por auto complacerme.

Y una vez mas me la jalé pensando en EL. En el hombre que me había dado la cogida mas intensa de mis 19 años y que ahora, 8 años después, aun no existía nadie que se le acercara. Que se le comparara.

Mientras me venia en intensos chorros de semen, juré que mañana no iba a desaprovechar la oportunidad que había estado esperando por tantísimo tiempo.

Mañana tenia una cita de negocios con el magnate hotelero Luis Ivan Landeros. Mañana volveríamos a vernos después de 8 años. Y esta vez las cosas iban a ser muy diferentes. Totalmente Diferentes #AhuevoCabron

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Llegué temprano al aeropuerto. No era un viaje largo, pero no me gustaba andar a las carreras. Cuando subí al avión, sentí una emoción contenida. Jamås pensé que este dia llegaría. Este no era solamente el viaje de negocios mas importante de toda mi carrera profesional, era también el viaje personal mas esperado desde hacia 8 años. Era el primer paso para La Revancha.
 De mi cuenta corría que Landeros recibiera una lección como la que EL me había dado.

Había visitado Nueva York varias veces, pero esta vez la emoción era diferente. Infinitamente diferente.

Al llegar, ya me esperaba uno de los choferes del corporativo. Todo estaba perfectamente planeado. Acordado.
La empresa para la que yo trabajaba me había asignado a mi para conseguir este contrato millonario. Nada podía fallar. De algo debían servir todos mis años de experiencia en el ramo. De mucho deberían servir, diría mi jefe. Al principio, yo no estaba tan entusiasmado en participar, pero cuando descubrí de quien se trataba, hice hasta lo imposible para quedarme a cargo de la encomienda.

Y aqui me encontraba, camino a uno de los reconocidos hoteles Landeros. Faltaba poco para la primera y mas importante junta de ejecutivos. Faltaba poco para volver a ver aquel desconocido que por una noche me hizo conocer la gloria y el infierno a la misma vez. Pero siempre hay oportunidad para una revancha. Esa oportunidad era hoy.

Después de acomodarme en la suite que me habían asignado, revisé una vez mas todos los documentos para la primera presentación que tendría lugar en unas horas. Era una oferta concreta, precisa y con ventajas para ambas partes. Yo tenia plena confianza en que iba a ser aprobada. Luis Ivan tendría la ultima palabra.
Iba a requerir de un gran esfuerzo para actuar como si nada. Pero tenia una enorme duda, podría EL reconocerme cuando me viera? Aquella noche EL estaba bastante tomado. Habían pasado 8 años y yo había cambiado físicamente. Ya no era el joven de 19 años delgado e inmaduro. Horas de dedicación en el gimnasio y una alimentación adecuada me habían servido de algo.

La duda de si me iba a reconocer o no, quedo despejada unas horas después cuando inició la junta. Estaba nervioso, no lo voy a negar; pero también estaba ansioso por verlo nuevamente en persona. Todos estos años, atraves de la televisión, el internet y el periódico, lo había visto madurar y ponerse aun mas bueno de lo que estaba cuando lo conocí,  la edad le sentaba muy bien.
Hoy estaríamos frente a frente. En una situación y circunstancias muy diferentes. Me sudaban las manos mientras esperaba su llegada.

--"Necesita algo, Sr. Arenas?" me pregunto una de las Secretarias del Corporativo.

--"No. Gracias."

--"El Sr. Landeros y sus asistentes llegaran unos minutos. Acaban de hablar para avisar que están atorados en el trafico."

Los minutos se convirtieron en casi una hora, pero finalmente llegaron. Primero entraron 3 hombres, uno de ellos con quien yo había estado hablando antes de concretar esta reunión. Los 3 se disculparon por el retraso. Yo estaba que me llevaba la chingada. Yo era puntual y no me gustaba hacer esperar a nadie ni que me hicieran esperar.

--"Le pido que nos disculpe, pero…."

--"No tienes que pedirle disculpas a nadie." Una voz ronca y masculina interrumpió en el cuarto de juntas. Esa voz que jamas podría olvidar. Era EL. Era Luis Ivan Landeros. "Se le esta pagando muy bien, los jefes no piden disculpa a sus empleados."

Sentí que la sangre me hervía de la rabia que me dio al referirse a mi como su empleado. Era un hijo de puta. Arrogante y Soberbio. Pasó a un lado de mi,  Ni siquiera me saludo. Bueno, ni siquiera me miró.
Caminó hasta su silla con la mirada perdida y el teléfono celular en la mano. Seguía siendo un Semental Completo. Se veía mejor que en las fotos que circulaban por los medios de comunicación. No cabía duda de que los años le sentaban cachondamente, el olor de su perfume me estremeció, era el mismo perfume de aquella noche. Era un macho de machos. Sin embargo, en su rostro se podía apreciar los estragos que le estaba causando su divorcio. Las ojeras y la expresión facial no mienten. Tampoco creo que estuviera haciendo un gran esfuerzo por ocultar nada.

--"Siento contradecirlo, Señor Landeros, pero yo no soy su empleado." respondí tratando de mantener una calma que estaba muy lejos de sentir. Yo quería que volteara a verme, yo quería saber si me iba a reconocer.

Y con mi respuesta logré llamar su atención, dejó el celular a un lado y levantó su mirada. La expresión en su rostro era fría e indiferente.  Me miró de arriba a abajo. Su mirada era imposible de leer. Sus gestos una barrera de acero que no permitía transmitir ninguna emoción.

Yo quería encontrar alguna señal de si me había reconocido o no. Pero su rostro no me decía nada, los movimientos de su cuerpo tampoco. Se puso de pie y nuestras miradas se cruzaron como espadas listas para la guerra. La vena de su cuello palpitaba aceleradamente, por fin una señal, por fin una muestra de algo. No sabia si me había reconocido o si estaba enfurecido por mi respuesta, pero
Por fin después de 8 años estábamos FRENTE A FRENTE. Por fin iniciaba la Revancha De Macho a Macho.

C O N T I N U A… No se pierdan el Episodio # 2 en el siguiente enlace:
http://elpadrastrocalientexxx.blogspot.com/2014/12/serie-caliente-revancha-de-macho-macho_19.html